Existen seres imaginarios nacidos de la necesidad de matar a la soledad,
pero son un espejismo ante la imperiosa necesidad de encontrar un personaje único,
un ser brillante y revelador,
ingenioso y nada egoista,
que haga del camino tortuoso que nos depara esta vida,
un camino sino menos tortuoso, de menos con un paisaje encantador.
Ahora los amigos son a distancia,
se alejan en un mundo que busca acercarse,
han dejado su milenaria labor de confidentes de lado
y buscan la manera de sobrepasarse y hacerse los inocentes.
Pero que van a ser estos los amigos,
que se olvidan que lo son si no se lo recuerdas,
que te cambian por una mujer o por un trago,
que se empecinan en sufrir y llamar la atención para ser queridos,
que se guardan esos pensamientos que deberían ser compartidos,
que regresan con la cola entre las patas cuando saben que todo lo han hecho mal
para después hacerlo mal de nuevo.
Que van a ser esto los amigos,
que corren al sonido del dinero y las comodidades,
como abejas a un panal,
que te obligan a cumplir deseos caprichosos como pruebas de amistad,
pero que van a saber de amistad,
sí, hoy lo son y mañana solo dios sabrá.
Un amigo estará ahi siempre aunque no le veas
y si no se acerca es porque te teme,
¿qué le haces a tus amigos para inspirar tal terror?
Un amigo no te aparta ni te ignora, te da tu lugar,
un amigo no te echa de su grupo social porque se avergüenza de ti,
un amigo no apoya todas tus decisiones,
te pone con los pies en la tierra.
No alejes a tus amigos,
el día en que mueras ellos llorarán en tu tumba,
ellos se acordarán de llamarte aunque tu cerebro enfermo olvide la realidad,
tus amigos son tu refugio a la soledad,
son tu lancha para ir a la pesca de sueños,
son lo único que debería ser verdad,
son lo que le da humanidad a este mundo hecho de bestias,
son lo que le dan pausa a este mundo que va de prisa a un acantilado,
son la razón de miles de alegrías